Gallardo Nos Cambió La Cara Otra Vez..

El Muñeco entró enchufadísimo en el segundo tiempo y asistió a Falcao para que sellara el 1-0. Hasta ahí, River no había hecho nada para ganar un partido que se jugo en medio de un clima denso en el Monumental. Los hinchas recibieron al equipo al grito de "Ustedes mátense en la cancha, que acá en la tribuna los vamos a alentar". Y pese a la victoria, hubo silbidos en el entretiempo y en el final del encuentro.

Después de un inicio en el que River arrancó como para llevarse por delante a Gimnasia de Jujuy, el equipo de Néstor Gorosito se desdibujó con cada ataque que malogró. Entonces no llamó la atención que los jugadores se fueran al vestuario bajo una silbatina generalizada. Antes, cuando La Banda saltó al campo de juego, la gente se había mostrado indiferente, pero unos segundos más tarde los hinchas les reclamaron huevo y corazón a quienes dicen defender la camiseta.

Los mayores silbidos se los llevaron Ahumada y Rosales, y contrariamente, Daniel Vega fue aplaudido en varias oportunidades. Pese a ello, la gente no perdonó a nadie cuando al término del primer tiempo el marcador cerró 0-0. La historia recién cambió en el complemento, en el momento en el que Gorosito escuchó el pedido de la popular y la platea y mandó al campo de juego a Marcelo Gallardo.

El Muñeco entró muy enchufado, rápido y preciso. Entonces, sólo con un par de toques, logró cambiarle la cara a River. Prueba de ello estuvo en el pase que el puso a Radamel Falcao para que, a los 14 minuto del segunto tiempo, sellara el gol de la victoria. Aunque ni siquiera un Gallardo en su mejor momento fue capaz de hacer milagros con este plantel. Es que pese a las ganas del ídolo, el equipo no logró ganar con tranquilidad, ni siquiera cuando los jujeños terminaron jugando nueve por las expulsiones de Pezutti y Ramasco.

Por eso, al finalizar el partido y ya consumada la tan ansiada victoria, los hinchas volvieron a repudiar a los jugadores. No fue para menos, el partido que tenían que ganar, lo perdieron por escándalo.

Fuente: La Página Millonaria